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2701068 Journal of Optometry 2009 7 Pages PDF
Abstract
La utilización de lentes de contacto es un factor que influye sumamente en la incidencia de la queratitis ulcerosa, en particular en los países desarrollados. La asociación entre queratitis por Acanthamoeba y el uso de lentes de contacto está firmemente establecida; podría representar aproximadamente hasta un 95% de los casos registrados. Antes de la popularización del uso de lentes de contacto, la queratitis por Acanthamoeba era muy poco frecuente. En el año 2000 se estimó que, a nivel mundial, había unos 80 millones de usuarios de lentes de contacto, de los cuales 33 millones residían en los Estados Unidos y, de ellos, el 90% utilizaban lentes de contacto blandas de hidrogel. Los problemas derivados del uso de lentes de contacto dependen de otros muchos factores, como el material del que está hecha la lente, la modalidad de uso, las medidas de higiene empleadas, el tipo de solución utilizada para la limpieza y el mantenimiento de la lente, el grado de cumplimiento terapéutico del usuario de las lentes respecto a su utilización y a su limpieza/mantenimiento, el uso de las lentes durante periodos excesivamente prolongados, el dormir con las lentes de contacto puestas, la frecuencia con la que el usuario se cambia de lentes y la limpieza de la funda de las lentes de contacto. Este artículo presenta una revisión minuciosa de la literatura, con el objetivo de resaltar el papel de uno de los principales factores de riesgo de desarrollo de queratitis infeccionsa, como es el uso de lentes de contacto, y con el fin de poner de relieve que el propio usuario de las lentes es, en ocasiones, el responsable de agravar este riesgo.
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