Article ID Journal Published Year Pages File Type
2739452 Apunts. Medicina de l'Esport 2009 8 Pages PDF
Abstract

ResumenHasta que los avances en genética permitan detectar y manipular los genes implicados en el alarmante aumento de la prevalencia de obesidad en niños y jóvenes, la única solución realista al problema de la obesidad infantil es la prevención. Hasta el momento, los intentos por reducir el alarmante incremento de obesidad infantil y juvenil siguen el modelo tradicional de reducción de la ingesta energética y aumento de los niveles de actividad física. No obstante, dicho modelo puede no ser el método más adecuado para poner en práctica con niños y niñas en período de crecimiento y desarrollo, dado que éstos requieren un balance energético positivo con el fin de obtener el aporte necesario de nutrientes para el adecuado crecimiento. La inactividad física es actualmente uno de los principales problemas de salud pública a escala mundial. En España, el 66% de los niños y niñas de hasta 15 años afirman no realizar o realizar de forma esporádica alguna actividad física a lo largo de la semana durante su tiempo libre. En niños y niñas con sobrepeso la actividad física vigorosa (AFV) sin restricción calórica produce efectos positivos sobre la composición corporal, y se observa que a través de su práctica se consiguen cambios favorables en el porcentaje de grasa corporal y de grasa visceral, en la densidad ósea, en el fitness cardiovascular y en otros factores de riesgo cardiometabólicos, que a menudo se acompañan de aumentos, no de reducciones, en la ingesta energética. Por tanto, parece que las actuales recomendaciones de actividad física en niños y jóvenes (150-180 min/semana a moderada-alta intensidad) pueden ser efectivos para la mejora de la composición corporal y el fitness en niños y en jóvenes con sobrepeso. Para los que todavía no presentan sobrepeso pueden ser necesarias cantidades incluso mayores (alrededor de 300 min/semana) para prevenir el exceso de acumulación de grasa. Los resultados de los trabajos incluidos en esta revisión muestran que añadir 2-3 h a la semana de práctica deportiva extraescolar durante el crecimiento permite atenuar la acumulación de masa grasa, incrementa las ganancias de masa muscular y de masa ósea, al mismo tiempo que mejora la condición física de los niños y de los jóvenes. La batalla contra la obesidad infantil debería centrarse en modificar los estilos de vida de los niños y jóvenes, no sólo desde el punto de vista nutricional, sino preferiblemente mediante el aumento en los niveles de AFV y la reducción del número de horas dedicadas a la realización de actividades sedentarias.

Until gene therapy allows to detect and manipulate those genes involved in excessive accumulation of fat in children and adolescents, prevention seems to be the only realistic solution for the increasing prevalence of childhood obesity. Traditional approaches include energy intake restrictions and some extra energy expenditure. However, this restricting energy intake might not be the best option for growing youths who need to be in a positive energy balance in order to ingest sufficient amounts of the nutrients needed for optimal growth. Physical inactivity is worldwide one of the biggest problems of public health. In Spain, approximately 66% of boys and girls under 15 years do not perform or rarely perform any kind of physical activity during their leisure free time. Vigorous physical activity (VPA), without restriction of energy intake, can produce favourable effects on body composition (reduction of total and visceral fat mass, and increased bone mass…), fitness levels and other cardio-metabolic risk factors. Moreover, VPA is often accompanied by increases, not decreases, in dietary energy intake. It appears that exercise doses of 155-180 minutes per week at moderate to high-intensity are effective in improving the body composition and fitness of overweight youths. For youths who are not overweight prior to the intervention, larger doses of approximately 300 minutes per week may be needed to prevent excess accretion of fat. Data presented in this review suggests that adding 2-3 hours per week of sport activities to the compulsory physical education courses seems to be effective in preventing excessive fat mass accumulation at the same time that it facilitates lean mass accretion and improves physical fitness in growing youths. The battle against childhood obesity should focus on changing the lifestyles of children and youths. Lifestyle interventions are more likely to be successful if they emphasize reduction of time devoted to sedentary activities and increased participation in daily VPA, rather than restriction of dietary energy intake.

Related Topics
Health Sciences Medicine and Dentistry Orthopedics, Sports Medicine and Rehabilitation
Authors
, , , , ,