Article ID Journal Published Year Pages File Type
8617059 EMC - Anestesia-Reanimación 2017 27 Pages PDF
Abstract
Los curares ejercen su acción miorrelajante al fijarse en los receptores colinérgicos nicotínicos de la placa motora. La succinilcolina es el único curare despolarizante utilizado en clínica y se emplea principalmente para la intubación traqueal y los procedimientos que requieren una relajación muscular breve. Tiene muchos efectos secundarios, como mialgias, hiperpotasemia en algunos pacientes (paraplejía, grandes quemados), curarización prolongada en presencia de seudocolinestarasas atípicas y reacciones anafilácticas. Los curares no despolarizantes pertenecen a dos familias, los aminoesteroides (vecuronio, rocuronio) y las benzilisoquinolinas (atracurio, cisatracurio). El plazo de acción, la profundidad del bloqueo muscular y su duración dependen del tipo de curare no despolarizante y de la dosis administrada. Los aminoesteroides se eliminan por el riñón, el hígado y la bilis. Las benzilisoquinolinas se metabolizan en el plasma por la vía de Hofmann y por las esterasas. La farmacocinética y la farmacodinámica de los curares se modifican por factores fisiológicos (edad, embarazo) y patológicos (insuficiencia renal, insuficiencia hepática, obesidad). Muchos fármacos interfieren con la acción de los curares. Los más frecuentes son los anestésicos halogenados, los antibióticos y el magnesio. Los curares se utilizan para la intubación traqueal, la relajación muscular peroperatoria y en reanimación para facilitar la ventilación artificial en algunos casos difíciles. El rocuronio, que tiene un plazo de acción corto, puede reemplazar a la succinilcolina para la intubación traqueal de secuencia rápida. Los curares se administran en bolo o en perfusión continua. La frecuencia de la curarización residual postoperatoria justifica el uso sistemático de la monitorización de la curarización.
Keywords
Related Topics
Health Sciences Medicine and Dentistry Anesthesiology and Pain Medicine
Authors
, ,