Complex stylized facts of the Mexican economy: a hirschmanian perspective (to attack the “fear of growing”, more and better)

We elaborate some complex stylized facts related to the Mexican economy. The analyzed period runs from 1960 to 2013 with selected subperiods. Our main findings are: 1) there are involuntary idle capacities in the manufacturing industries; 2) the growth of the Mexican economy is not balanced but unbalanced; 3) there is an inflation-free environment. This fact is consistent with the previous ones; 4) there is a mixed of efficient and inefficient sequences of investment; 5) the stimulus of manufacturing exports on macroeconomic performance has been offset by its imports; 6) the deficits in manufacturing balance and in the current account have been financed without difficulty. Of course, this financing capacity constitutes a second best condition; 7) according to a backward linkages analysis, the towing capacity of manufacturing sector over the Mexican economy would be a larger one if the manufacturing imports penetration had not been so intense since the trade liberalization; and 8) the size of the positive effect of the manufacturing sector on the economy and on the non-manufacturing sectors diminished since the early eighties. Our complex stylized facts highlight the need for an upgrading of the current economic policies.

ResumenElaboramos algunos hechos estilizados complejos relacionados con la economía mexicana. El período analizado se extiende desde 1960 hasta 2013, con subperiodos seleccionados. Nuestras principales conclusiones son las siguientes: 1) existen capacidades ociosas involuntarias en las industrias manufactureras; 2) el crecimiento de la economía mexicana no es balanceado sino desbalanceado; 3) existe un entorno macroeconómico libre de inflación. Este hecho es coherente con los anteriores; 4) se observa una secuencia de inversiones eficientes e ineficientes; 5) el estímulo de las exportaciones manufactureras hacia la economía en su conjunto ha sido parcialmente anulado por sus importaciones; 6) los déficits en la balanza manufacturera y en la cuenta corriente se han financiado sin dificultad. Sobra decir que esta capacidad de financiamiento constituye una segunda mejor opción; 7) de acuerdo con un análisis de encadenamientos hacia atrás, la capacidad de arrastre del sector manufacturero hacia la economía sería mayor si la penetración de las importaciones no hubiera sido tan intensa desde la liberalización del comercio; y 8) el efecto positivo del sector manufacturero en la economía y en los sectores no manufactureros ha disminuido desde principios de los años ochenta. Los hechos propuestos revelan la necesidad de mejorar las políticas económicas aplicadas actualmente.