Institutional Racism in Enforcing Immigration Law

The United States is committed to aggressive efforts to remove unauthorized immigrants while honoring its commitment to race neutrality. Yet immigration enforcement has disproportionately targeted Mexicans and Central Americans. The racial bias can be found at both the federal and local levels, where local police are becoming increasingly involved in locating unauthorized immigrants. The local example featured here is Arizona because of its historical relationship with Mexico and its enthusiasm for immigration enforcement. I find that the current mix of federal and local enforcement discriminates racially through profiling, hyper-surveillance, abusive stops, problematic searches, and unwarranted detention.

ResumenEstados Unidos se ha comprometido a realizar importantes esfuerzos para sacar a los inmigrantes no autorizados de su territorio, al mismo tiempo que mantiene su compromiso con la neutralidad racial; sin embargo, la institución encargada de hacer cumplir las leyes de inmigración se han ensañado de manera desproporcionada contra los mexicanos y centroamericanos. El prejuicio racial se puede encontrar tanto en el nivel federal como en el local, donde la policía cada vez se involucra más en ubicar a los inmigrantes no autorizados. El ejemplo que en este artículo analizamos es el de Arizona, debido a su relación histórica con México y a su vehemencia en la persecución de inmigrantes. Se muestra cómo el trabajo conjunto de las agencias locales y federales resulta racialmente discriminatorio debido a los perfiles que elabora, así como por la vigilancia exagerada, los retenes abusivos, los registros problemáticos y las detenciones arbitrarias.