کد مقاله | کد نشریه | سال انتشار | مقاله انگلیسی | نسخه تمام متن |
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4109193 | 1269610 | 2015 | 14 صفحه PDF | دانلود رایگان |
La cobertura de las pérdidas de sustancia cutáneas es una problemática que se plantea diariamente. Las técnicas clásicas de cirugía reparadora recurren a los injertos y a los diferentes colgajos para conseguir el cierre quirúrgico de las heridas. A partir de la década de 1970, aparecieron nuevas vías de investigación para garantizar la supervivencia de los pacientes con grandes superficies quemadas. Se trataba de los cultivos celulares de queratinocitos, desarrollados por Grienwald y Green. Desde entonces, se han explorado nuevas vías relacionadas con la epidermis, pero también con la parte dérmica de la piel. Poco a poco han ido apareciendo en el mercado diferentes sustitutos biológicos, sintéticos o biosintéticos, puestos a disposición de los cirujanos para permitirles garantizar la sustitución parcial o total del revestimiento cutáneo, de forma transitoria o definitiva. En la actualidad, su uso continúa esencialmente en los grandes quemados, pero debería ofrecer nuevas oportunidades quirúrgicas para el tratamiento de las heridas profundas y extensas que se producen en los politraumatismos, en dermohipodermitis bacterianas necrosantes o en las resecciones oncológicas amplias.
Journal: EMC - Cirugía Plástica Reparadora y Estética - Volume 23, Issue 1, March 2015, Pages 1–14