Subepithelial pelvic hematoma

IntroductionSubepithelial pelvic hematoma (Antopol–Goldman lesion) is a rare condition that clinically simulates a renal or pelvic neoplasm, whose final diagnosis is established in most of the cases by the pathologist after the nephrectomy. To avoid this, imaging tests and high diagnostic suspicion are essential.Material and methodsThe case of a 43-year-old female patient is presented. She had no background of interest and she came due to experiencing an acute pain in the left renal fossa after a physical effort. This patient was studied by Ultrasonography, Computed Tomography (CT), and evolutively with magnetic resonance (MR).ResultsThe X-ray studies showed a lesion in the left renal sinus with characteristics suggestive of subepithelial renal pelvis hematoma, without data suggesting underlying lesion. The treatment of the patient was conservative, confirming the disappearance of the lesion in the follow-up studies.ConclusionKnowledge of the X-ray findings of the Antopol–Goldman lesion in different imaging tests and an elevated index of suspicion are crucial in the management of patients affected by this uncommon condition. These make it possible to avoid an unnecessary nephrectomy.

ResumenIntroducciónEl hematoma pélvico subepitelial (lesión de Antopol Goldman) es una rara entidad que clínicamente simula una neoplasia renal o pélvica, cuyo diagnóstico definitivo se establece en la mayoría de las ocasiones por el anatomopatólogo tras la nefrectomía. Para evitar ésta, son esenciales las pruebas de imagen y una alta sospecha diagnóstica.Material y métodosSe presenta una paciente de 43 años sin antecedentes de interés que acudió con un cuadro de dolor agudo en la fosa renal izquierda tras un esfuerzo físico y que fue estudiada mediante Ecografía, Tomografía Computarizada (TC) y evolutivamente con Resonancia Magnética (RM).ResultadosLas exploraciones radiológicas mostraron una lesión en el seno renal izquierdo con características sugestivas de hematoma subepitelial de la pelvis renal, sin datos que sugiriesen una lesión subyacente. El tratamiento de la paciente fue conservador, confirmándose en exploraciones de seguimiento la desaparición de la lesión.ConclusiónEl conocimiento de los hallazgos radiológicos de la lesión de Antopol Goldman en las distintas pruebas de imagen, y un índice de sospecha elevado, son cruciales en el manejo de los pacientes afectos por esta infrecuente entidad, pudiendo evitar una nefrectomía innecesaria.